sábado, 29 de mayo de 2010

Futuro #1

De Nicolás Prividera en ojosabiertos
Texto que resume en pocas palabras, uno de los problemas actuales del cine. Eso sí, con un toque esperanzador.
Nota

H.

viernes, 28 de mayo de 2010

¿QUÉ ES ENTONCES LO HITCHCOCKIANO? # 1

Si es que existe. Aprovechando que ya nos clavamos 8 películas supuestamente “hitchcockianas” podemos charlar un poco sobre eso. Cuando programamos el ciclo el criterio fue más que nada buscar películas que no se relacionen con Hitchcock a través de simples homenajes. Creo que esta diferencia se puede ver muy marcada entre las películas Fahrenheit 451 y La Novia Vestía de Negro de Truffaut. La primera no la pusimos tal vez porque a algunos de nosotros directamente no nos gusta, pero hay algo claro entre, por ejemplo el zoom/travelling hitchcockiano (de Vértigo) usado en Fahrenheit como simple recurso intertextual, y la estructura completa de La Novia Vestía de Negro, como si Truffaut hubiese entendido algo nuevo.

Para mi hay toda una cuestión con lo que es aprender a mirar. Si en la mejor camada de películas de Hitchcock (desde mediados de los 50 a principios de los 60) existía realmente una política del pensamiento a partir de la mirada (La Ventana Indiscreta, o Psicosis por ejemplo), es en la versión moderna de estos patrones de suspense narrativo donde ya la cámara parece ir a buscar decididamente ciertos momentos de expectación pura. No se si se acuerdan cuando Jeanne Moreau mata a su primera víctima, su pañuelo se va volando y la cámara se lo queda mirando, como si estuviese por cerrar la escena pero con una duración más larga de la normal, para luego encuadrar un avión despegando y continuar ese movimiento puramente perceptivo. La escena que vimos antes es como que va “seteando” una forma de mirar las cosas, y nosotros quedamos configurados de una cierta forma; y de repente sucede algo completamente desconectado. En esos momentos pasa algo rarísimo, las cosas “de la realidad” o de “no aparente puesta en escena” empiezan a verse con una atención particular. Es rarísimo. Me acuerdo también de un plano de Someone’s Watching Me. La protagonista viaja en auto mientras ensaya (sola) lo que podría llegar a decir en sus entrevistas de trabajo, y la escena finaliza con un plano filmado desde el medio de la calle con un leve paneo hacia arriba, y vemos muchísimos autos ir venir por todos lados. Por alguna razón ese plano me parece increíble.

Recién estaba pensando y creo que tendríamos que haber proyectado Psicosis, aunque sea de Hitchcock, porque ahí está todo. Ahí es donde se manifiesta ya deliberadamente toda una nueva conciencia moderna dentro del cine mismo de Hitchcock. Hasta la estructura partida en dos (antes y después de la ducha) sepulta algo para meterse en otro lado. Esa “profundidad del alma y las pasiones de las personas” que era posible interpretar en su período “todavía clásico”, ahora era conscientemente puesto en escena. La identificación con Norman Bates es la clave, en esa secuencia con el auto hundiéndose en el pantano. El mundo que se nos presenta después de la escena de la ducha es totalmente nuevo, uno no sabe de donde agarrarse y termina entregándose por momentos a la simpatía de Norman. Pasábamos de ver una historia clara y causal sobre el robo de $40.000 al interior de lo más oscuro de la psicosis de un personaje jamás visto en el cine.

Mientras sigo pensando me sigo arrepintiendo de no haber programado muchas más películas. No sólo varias que pensamos se quedaron afuera, como Doble de Cuerpo (Brian de Palma, 1984), o hasta incluso llegamos a pensar en El Gran Lebowski (Joel & Ethan Coen, 1998); sino que ahora se me ocurre que hay todo un género heredero de Los Pájaros: las películas de zombies. Esas plagas inhumanas que amenazan a la continuidad del mundo casi siempre se manifiestan en las películas como la materialización violenta de los deseos reprimidos de alguien, o de la imposibilidad de avanzar en un conflicto. Esto ya aparecía en La ventana indiscreta, con la indecisión de James Stewart sobre su futuro matrimonio; y en Los Pájaros nótese la enorme similitud entre la madre del protagonista y Tippi Hedren, hay algo turbio sucediendo ahí en esa familia que se materializa con la llegada de los pájaros. Algo así, probablemente en menor medida, también pasa en Shaun of the Dead, esa inteligente comedia negra de zombies donde tenemos a un personaje que no puede entregarse al compromiso que se le viene encima. Es clarísimo en el plano final, cuando aún conserva a su amigo hecho zombie guardado en un cobertizo para jugar videojuegos cada tanto. Me hace acordar a lo que pasa en las películas de Judd Apatow. Pero bueno ya me fui demasiado.

Debe ser porque Hitchcock inventó todo.

miércoles, 26 de mayo de 2010

VIERNES 28: AUDREY HEPBURN + AUDREY HEPBURN = SUSPENSE!



Sin darnos cuenta programamos para al gran final del ciclo hitchcockiano 2 películas protagonizadas por Audrey Hepburn, y las dos son imperdibles. Sola en la oscuridad (Wait Until Dark, 1967, de Terence Young) es una de esas películas que nuestros padres y abuelos recuerdan con claridad el momento de su estreno. Su intenso suspense y claustrofobia la hace inolvidable. Sólo miren el trailer y su advertencia. Charade (1963, Stanley Donen) es otra joya hitchcockiana perfecta, y esta vez contando también con un algo envejecido Cary Grant. El director de Singin' in the Rain (1954) logra combinar exitosamente a Hitchcock, al slapstick y al romance al compás de una banda sonora extremadamente pegadiza de Henry Mancini (el que compuso la música de La Pantera Rosa).

Como las dos películas duran casi 2 horas cada una, pedimos por favor PUNTUALIDAD. La primera empieza a las 18hs en punto y la segunda a las 20hs en punto. No es para hinchar las bolas, pero a las 22 en punto tiene que estar el aula cerrada y todos los equipos en el set porque cierran.

¡Pero vengan! Somos cada vez más y se pone cada vez más bueno. Y tal vez anunciemos el próximo ciclo...

sábado, 22 de mayo de 2010

OPERA (DARIO ARGENTO, 1987)


En mi blog hace un tiempo había escrito algo sobre esta película, pero ahora lo leí y no me cabe mucho, como me pasa con casi todo lo que escribo. Así que prefiero, en vez de copiar y pegar ese texto acá, directamente poner: ¿qué onda? Hablemos de la película. Noté que causó muchísimas risas.

De paso dejo acá un link: encontré la banda sonora para bajar.

miércoles, 19 de mayo de 2010

NOVEDADES DE LA SALA #1



Estamos muy contentos de contarles que conseguimos tener acceso a un equipo de sonido 5.1 para INSTALAR definitivamente en la sala. Así como también conseguimos que nos dejen modificar (es decir martillar clavar, lo que sea) lo que necesitemos. Es probable que instalemos una de esas jaulitas de metal para colgar al cañón del techo.

En el momento de la imagen de la izquierda, en la pared había un enorme sticker con algo escrito que no nos permitía proyectar nada. Por eso pusimos esa tabla blanca. Ahora, como arrancamos el sticker y pintamos el fondo, quedó perfecta. Lo que significa que proyectamos en la pared completa sin necesidad de poner algo encima.

Otro detalle: los que vinieron a la primera función de todas seguro notaron que entraba bastante luz desde las pequeñas ventanas de arriba de la puerta de entrada y desde los vidrios del costado izquierdo. ¡Tema solucionado! Nos las arreglamos para tapar todo con negro. Ahora podemos ver las películas a oscuras, como debe ser.

Hay una última cosa que nos queda pendiente, ¡y aceptamos sugerencias! ¿Cómo hacer para no tener que sentarnos en los bancos de aula? Posteen sus sugerencias. ¡Y vengan al ciclo!

martes, 18 de mayo de 2010

VIERNES 21 - DOS MAESTROS DEL HORROR


A este viernes le corresponde el doblete de terror de la mano de dos maestros: el norteamericano John Carpenter y el italiano Dario Argento, así que vamos a tener la oportunidad de ver quién entendió mejor a Hitchcock. En el caso de Carpenter se trata de Someone's Watching Me (1978), un telefilm que rodó meses antes de su reconocimiento mundial con Halloween. En una entrevista incluída en el precioso DVD que tenemos para la ocasión, Carpenter afirma que cuando filmó Halloween tuvo en cuenta muchísimas cosas que aprendió con Someone's Watching Me, o sea, directamente se autocopió cosas. Esta proyección es una buena oportunidad para aquellos que ya conocen a John Carpenter de ver un costado poco visitado por su filmografía, y para aquellos que no lo conozcan es una oportunidad para conocerlo de una vez por todas (porque es uno de los grandes). Seguramente insistamos con Carpenter en futuros ciclos.

Por otro lado, Opera también es una película poco vista. Argento empezó en 1969 con El pájaro de las plumas de cristal, bien adentro del Giallo, y armó una especie de "trilogía de los animales" junto a El gato de las nueve colas (1971) y Cuatro moscas de terciopelo gris (1971). Lentamente se metió en una especie de mundo de rock progresivo y terror gótico, donde le dio duro al gore y creó sus mejores películas, entre las que se encuentran Rojo Profundo (1975) y Suspiria (1977). Con Opera pasa algo rarísimo: Argento resignifica todo ese período, ya en 1987, pero desde una mirada hitchcockiana, como una película de terror manierista. Es una experiencia totalmente fuera de lugar. Especialmente por ese increible travelling giratorio descendiente (subjetiva de un pájaro) que nos hace creer por unos momentos que estamos en una montaña rusa, pero en el cine.

¡Vengan! ¡No se lo pierdan!

lunes, 17 de mayo de 2010

CICLO "HITCHCOCK SEGÚN EL CINE"

Los discípulos del maestro




TODOS LOS VIERNES DE MAYO
A las 18 hs, y a las 20 hs.

FADU - CIUDAD UNIVERSITARIA - PABELLÓN III - SUBSUELO (AL LADO DEL SET)

En América, ustedes llaman a este hombre Hitch. En Francia, lo llamamos Sr. Hitchcock. Ustedes lo respetan porque filma escenas de amor como si fuesen asesinatos. Nosotros lo respetamos porque filma asesinatos como si fueran escenas de amor. Cuando empecé a dirigir películas descubrí que el Sr. Hitchcock era fantástico, tal vez porque pesaba más de 200 libras. Entonces intenté comer cada vez más, aumenté unas 20 libras, pero obviamente no funcionó. Sabía que tenía que encontrar otra forma de entender las proporciones de su genialidad. Así que le pedí al Sr. Hitchcock que me diera una entrevista de 50 horas, para revelarme todos sus secretos. El resultado fue un libro. En realidad era una especie de libro de cocina, lleno de recetas para hacer películas. Pero el gran secreto de Hitchcock es un secreto del cine mismo.
François Truffaut
Extraído de su discurso en el tardío homenaje a Alfred Hitchcock de la AFI en 1979.


A lo largo de ocho películas de diferentes realizadores daremos cuenta de “lo hitchcockiano”: la influencia del director mas importante del cine clásico dentro del panorama del cine moderno. ¿Maestría en el suspense? ¿Música de Bernard Herrmann? ¿MacGuffins? Todo eso y mucho más en películas que evitan el simple homenaje y que encuentran su punto en común en la aplicación de toda una política hitchcokiana de la mirada. Toda una forma de ver el mundo.
Entre la selección de películas se encuentran tanto clásicos inmortales, como Vestida para matar (Brian De Palma, 1980), y rarezas muy difíciles de conseguir como el telefilm hitchcockiano al extremo de John Carpenter titulado Someone’s Watching Me (1978), o el thriller de intriga matrimonial La femme infidele (Claude Chabrol, 1969).



PROGRAMACIÓN:

Viernes 7

18:00 – Hermanas diabólicas
(Sisters, Brian De Palma, 1973)
De Palma es, por cantidad y por calidad, el principal exponente del cine hitchcockiano. En esta historia de psicosis, hermanas siamesas, pantallas divididas y suspense está la clave de la devoción de este director por el cine de Hitchcock. También logra contar con una excepcional banda sonora original de Bernard Herrmann (el principal colaborador musical del maestro durante su etapa más prolífica), y demuestra que él mismo puede ser un gran director.

20:00 - Vestida Para Matar
(Dressed to Kill, Brian de Palma, 1980)
Esta película es algo así como la Psicosis de Brian De Palma, donde con un altísimo nivel de erotismo vuelve sobre casi todos los puntos del cine de Hitchcock, hasta con un momento equivalente a la famosa escena de la ducha. Incluso se puede encontrar un diálogo constante con el tema de su posterior película (también hitchcockiana) Doble de Cuerpo (1984). En Vestida para matar De Palma trabaja el suspense con maestría en sorprendentes secuencias cargadas de tensión y carentes de diálogo alguno, como la memorable escena de persecución en el museo.


Viernes 14

18:00 - La Mujer Infiel
(La femme infidèle, Claude Chabrol, 1969)
En esta película de intriga matrimonial Chabrol aplica sistemáticamente el suspense con una serie de tensiones entre puntos de vista y saberes. Su premisa es muy simple: un hombre comienza a sospechar de que su mujer lo engaña. Con Stéphane Audran y Michel Bouquet. Los norteamericanos hicieron una remake con Richard Gere y Diane Lane en el año 2002 titulada Infidelidad, nosotros presentamos la versión original de Chabrol, una rareza inédita.

20:00 - La Novia Vestía de Negro
(La mariée était en noir, Francois Truffaut, 1968)
Este es el segundo intento de Truffaut de entrar en el mundo hitchcockiano. La primera vez falló con Fahrenheit 451 (1966), pero aquí regresa con un thriller de venganza que, aunque Tarantino niegue haberlo visto, parece ser la principal fuente de saqueos para la intertextual saga Kill Bill. Jeanne Moreau sigue su lista de nombres a vengar tras el asesinato de su novio en medio de la boda. Cada secuencia parece una clase magistral de la técnica hitchcockiana del suspense, así como la demostración de que Truffaut sí aprendió algo de esas valiosísimas entrevistas que tuvo con el maestro.


Viernes 21

18:00 - Someone’s Watching Me
(John Carpenter, 1978)
El cine de Carpenter siempre se inclinó más hacia una devoción por la figura de Howard Hawks. Sin embargo, en esta rareza de telefilm (rodado el mismo año que Halloween) pareciera ser otro declarado hitchcockiano, como lo haría Brian De Palma. De nuevo nos encontramos con edificios enfrentados, telescopios, y una escena de suspense tras otra. La protagonista de esta película es observada, pero logramos ver a partir de esto como se va desarrollando su propio voyeurismo. Una película quizás olvidada, pero imperdible.

20:00 – Opera
(Dario Argento, 1987)
Aunque toda la obra de Argento este algo teñida de un color hitchcockiano, Opera es su verdadera incursión en todos los puntos. Argento logra hacer convivir satisfactoriamente a Los Pájaros y a La Ventana Indiscreta en un slasher/giallo, donde ahora el voyeurismo se relaciona directamente con la violencia del cine de terror y sus espectadores. Opera es también, quizás después de Suspiria (1977), la película de Argento mejor cuidada desde la fotografía y la puesta en escena.


Viernes 28

18:00 – Sola en la oscuridad
(Wait until dark, Terence Young, 1967)
Audrey Hepburn es ciega y víctima de peligrosos criminales que buscan una carga de droga dentro de una muñeca que por alguna razón está en su casa. Young, basándose en una obra de teatro, logra lo mismo que Hitchcock cuando concentra toda la acción en un lugar (como en Lifeboat o Rope). El resultado es una película extremadamente claustrofóbica e intensa. El papel de Hepburn es excepcional y como el principal villano (inteligente como todos los del maestro) se destaca el genial Richard Crenna.

20:00 – Charade
(Stanley Donen, 1963)
El director de Cantando bajo la lluvia en plan Intriga Internacional no podía ser menos que una catarata de momentos hitchcockianos llevados a la caricatura total. El disparador de la película es el del típico policial: una cierta cantidad de dinero por el que pelean cuatro personajes, conspiraciones varias, peleas arriba de los techos y si a eso le sumamos la chispa que sale de cada fotograma en el que Cary Grant y Audrey Hepburn están juntos, mas un timing justísimo para la comedia slapstick, la ecuación no podría dar un resultado mas perfecto. Filmada en un technicolor abrumante y sin miedo de caer en el ridiculo, Charade es todo un mundo por descubrir.